Ya desde los orígenes del tenis conocemos, más por patentes que por ejemplares conservados, conceptos de raquetas con formas anómalas o mecanismos integrados que buscan un “plus” frente a las raquetas ortodoxas de su época. 

Sorprende ver antiquísimas raquetas con doble tamiz, ajuste de balance, control de tensión, plegable, etc.

Si fue así ya en la época de la madera, la llegada de otros materiales facilitó el desarrollo de conceptos diferentes con objetivos dispares, algunos más bien parecen buscar un sentido diferenciador como fin comercial que por el desarrollo de alguna característica determinada. 

Se muestran a continuación algunos de los múltiples conceptos que le dan un punto “loco” a nuestro deporte. 

En España, como ocurrió en todo el mundo, el tenis se extendió a través de las distintas colonias británicas afincadas en el país. El material viajaba con ellos en su equipaje.

Las raquetas más antiguas que encontramos en España, marcadas con el sello de distintos almacenes de material deportivo de Barcelona, Madrid, Valencia , San Sebastián, etc , era en realidad de fabricación extranjera. Inicialmente británico,  rápidamente se comercializaron también raquetas de Francia, Alemania y Suiza. La primera referencia de raqueta fabricada en España es la CM que elaboró artesanalmente Joaquín Llasat a partir de 1907. Sobre 1925, además de CM, asoman nuevas marcas como G Jaraute y EP Eugenio Puig y Máxima GC. Por medio de catálogos, facturas y anuncios también conocemos las manufacturas de Cobos, Taberdet, Vicente Ferrandis Llácer, Chic y Ernest Witty con la comercialización de una raqueta anglo-española.Todas ellas raquetas de una calidad más que aceptable, se construyen según los cánones de la época. 

Cabe destacar al artesano Eugenio Puig que desde el principio parece estar pendiente de las novedades del proceso de construcción (patentes actualizadas) y desarrollará modelos destacables que hoy son muy apreciados en el coleccionismo. 

Según se populariza el tenis aparecen nuevas marcas, algunos modelos de las marcas Ikatxue o Fereust rebajan la calidad para ofrecer precios más asequibles. Marcas muy comercializadas como Reno o Climax (marca que absorbe la antigua Maxim GC después llamada Gico) aportan catálogos con buena variedad de modelos.

La fabricación nacional continuará durante la transición a nuevos materiales ofreciendo modelos metálicos (March, Stub, Climax, etc) e incluso innovando combinaciones de nuevos materiales (Roy-Grac, Cyclon, Bormak, etc) sucumbiendo en la actualidad donde la producción mundial se concentra en países asiáticos.